Las (otras) mejores películas del 2018
Fue un año tan bueno para el cine que no basta con un Top 10.
En el pasado año vi tanto buen cine que limitarme a tan solo 10 películas me resultó muy difícil. Dicho eso, sí encuentro valor en la “camisa de fuerza” que nos imponemos a la hora seleccionar diez, pues nos obliga a evaluar más detenidamente cuáles fueron aquellas que dejaron una impresión indeleble. Así que mañana estaré publicando mi Top 10. Hoy, quisiera destacar otros largometrajes que considero merecen reconocimiento, presentados a continuación en orden alfabético.
A Quiet Place
Aun con la multiplicidad de opciones que tenemos en nuestros hogares para ver miles de películas, la experiencia comunal que ofrece la sala de cine jamás podrá ser reproducida, esa magia que se da cuando decenas o cientos de personas están cautivas de la pantalla. La premier de este filme de John Krasinski fue una de mis salidas al cine más divertidas del 2018. La tensión en la sala era palpable; el silencio, ensordecedor. El actor y director prácticamente logró que el público fuera un miembro más del elenco, conteniendo hasta el más mínimo suspiro para no alertar a los monstruos que acechaban a esta familia. Lee la reseña
Annihilation
Si A Quiet Place me la disfruté en una sala llena a capacidad, esta la vi en una virtualmente vacía. Tirada sin pena ni gloria en los cines a principios de año por Paramount Pictures antes de venderle la distribución internacional a Netflix, el largometraje de Alex Garland jamás iba a ser un éxito taquillero. Su adaptación de la novela de Jeff VanderMeer contenía demasiada influencia de Andrei Tarkovsky para ser exhibida en una sala comercial, pero probó ser una fascinante reinterpretación del argumento, estética y ambientación del clásico Stalker. Ninguna película de ciencia ficción igualó su ambición en los pasados 12 meses. Lee la reseña
El silencio del viento
La mejor película puertorriqueña del año. La ópera prima del cineasta Álvaro Aponte trabaja un drama humanista acerca de la inmigración ilegal, esto a través de pocas palabras y un caudal de virtudes cinematográficas, desde la impactante cinematografía hasta el sensacional diseño de sonido y manejo de cámara. Como todo lo demás en este país, el cine del patio atraviesa momentos difíciles, de recortes y falta de apoyo, pero paradójicamente, también está produciendo sus mejores películas. Aponte Centeno tiene otro largometraje en agenda para estrenar en el 2019. No puedo esperar a verlo. Lee la reseña
If Beale Street Could Talk
Si bien es cierto que la obra literaria de James Baldwin no puede ser replicada a cabalidad en ningún otro medio, Barry Jenkins logra hacerle justicia cinematográficamente. En manos del director de Moonlight, la hermosa prosa del autor estadounidense se transforma en preciosas imágenes de capturan el sentido de añoranza que emana de la novela homónima acerca de dos jovencitos de raza negra, profundamente enamorados, y las injusticias tanto sociales como raciales que se interponen en su romance. El elenco es de ensueño, pero la pareja protagónica -interpretada por Kiki Layne y Stephan James- es algo especial.
Mission: Impossible – Fallout
Es posible que Tom Cruise se mate haciendo una de estas películas. Esperemos que no pase, y que Cruise pueda continuar realizando los increíbles stunts que son la gasolina de lo que en esencia se ha convertido en su versión “big budget” de Jackass, ya que esta es la rara serie fílmica que mejora con cada nueva entrega. Fallout amarró varios de los hilos narrativos que se habían tejido a lo largo de la franquicia y los colmó con las más impresionantes secuencias de acción que se han visto en ella. Lee la reseña
Private Life
En un mundo justo, los nombres de Paul Giamatti, Kayli Carter y -especialmente- Kathryn Hahn estarían siendo mencionados en todas las nominaciones a los premios que se avecinan en los próximos meses, junto al de la directora y guionista Tamara Jenkins. Si alguna vez se ha preguntado “¿adónde han ido a parar todas las comedias y dramas para adultos?”, sepa que se siguen haciendo, solo que hay que escarbar en las plataformas digitales para encontrar joyitas como esta, una producción de mediano presupuesto, ejemplarmente actuada y escrita. Comiquísima.
Espero no tener que esperar 11 años por lo próximo de Jenkins.
Shoplifters
El maestro japonés Hirokazu Kore-eda se alzó con la Palma de Oro en Cannes con este entrañable drama que me robó el corazón durante dos horas antes de estrujármelo en los últimos 30 minutos. Partiendo de la realidad de que el amor más profundo y sincero no proviene necesariamente de la familia en la que naces, sino la que eliges, Kore-eda nos sumerge en las vidas de seis personas que viven bajo un mismo techo y nos envuelve en el afanoso calor que los mantiene unidos, haciéndonos testigos de muchos de los momentos más tiernos que se proyectaron en el cine en el 2018.
Sorry to Bother You
Boots Riley se tira de pecho en su osado debut como director, una sagaz sátira de nuestros tiempos que además sirve como un explosivo manifestó anticapitalista dirigido a dinamitar tanto la pantalla como todas nuestras expectativas. Visualmente inventiva, 100% original y más “fo’ real, fo’ real shit” que el más reciente “Spike Lee Joint”, la ópera prima del rapero y activista contiene las típicas asperezas que se observan en la mayoría de los primeros trabajos cinematográficos, pero también el vigor y atrevimiento de aquellos que se lanzan a dirigir una película como si fuera su única oportunidad de hacerlo.
Spider-Man: Into the Spider-Verse
Black Panther y Avengers: Infinity War habrán sido muy buenos ejemplos de la clase de entretenimiento que los filmes de superhéroes pueden ofrecer, pero esta fantástica cinta animada fue clase aparte. La pasión detrás de este proyecto se aprecia en cada colorido recuadro -diseñado digitalmente para evocar el estilo de los cómics- y en la manera tan eficaz como se nos presenta el origen de Spider-Man desde múltiples perspectivas tan distintas que hacen al arácnido superhéroe más universal que nunca. Sus asombrosas imágenes son dignas de una exposición. Lee la reseña
The Favourite
Si los personajes interpretados por Olivia Colman, Rachel Weisz y Emma Stone hubieran aparecido en Game of Thrones, la sangrienta lucha por el trono habría acabado a mitad de la primera temporada de la serie de HBO. Esta venenosa comedia del director Yorgos Lanthimos trae la malicia de Mean Girls al típico drama de época, aunque de “típico” no tiene nada. Verbalmente anacrónico y temáticamente moderno, el libreto de Deborah Davis y Tony McNamara es un deleite para los amantes del humor oscuro. Lee la reseña
You Were Never Really Here
Lynne Ramsay dirige a Joaquin Phoenix en Taxi Driver 2018 con música de Jonny Greenwood. ¿Qué de todo es no suena atractivo? La narración de “Travis Bickle” es reemplazada por la hermética e intensa actuación de Phoenix -una que debería estar recibiendo más atención de la que ha tenido-, desarrollada a través del trauma y sus estragos para contar una arquetípica historia de venganza que Ramsay convierte en un banquete para la pupila a través de su singular estilo. Greenwood se encarga de estimular el oído con una de sus mejores bandas sonoras hasta el momento. Y Phoenix, pues… ¿cuándo ha dado menos del máximo?