“Teen Titans Go!” llega al cine con sátira y picardía
La primera película de estos coloridos superhéroes es la “Deadpool” que puedes ver son tus hijos.
Mientras Warner Bros. continúa tratando de corregir las faltas que han desfavorecido sus grandes adaptaciones de DC Comics -los recientes tráilers de Shazam! y Aquaman son un claro indicador de esto-, las producciones animadas son un área en la que estos personajes siempre han brillado. Así lo ha sido desde los clásicos cortos de “Superman” creados por Fleisher Studios en los años 40, hasta las fantásticas series de Batman: The Animated Series y Justice League Unlimited. En el cine, estos superhéroes se han distanciado del sombrío estilo que ha caracterizado los filmes de DC bajo la supervisión de Zack Snyder, apostando a comedias como The Lego Batman Movie y la igualmente divertida Teen Titans Go! To the Movies, que llega hoy a las salas.
Hace apenas una semana, vimos a “Robin” decir “Fuck Batman” en el “ultra hardcore” tráiler de la serie Titans, dirigida a mayores de 18 años. El contraste no podría ser más marcado al ver al colorido y alegre “Boy Wonder” liderar aquí a un grupo de pequeños justicieros cuya misión es conseguir que hagan una película acerca de él. Si el chiste no se cuenta solo, es porque los guionistas se encargan de hacerlo una y otra vez, al resaltar el hecho de que Warner sería capaz de hacer un largometraje de TODO elemento contenido en el universo de “Batman” antes de producir una de su famoso compinche. Las burlas no se acaban ahí, y se aplaude el que el estudio acepte un sentido del humor tan autocrítico.
Nadie se salva de los chistes a expensas de este popular subgénero. Marvel y Disney también se lleva su merecida agüita, así como los tóxicos fans que laceran el simple disfrute de este medio de entretenimiento. Sin embargo, todo esto es para los manganzones en las butacas, aquellos que podrán notar cuando la vibrante animación -a cargo de Warner Bros. Animation, bajo la dirección de Aaron Horvath y Peter Rida Michail- cambia de momento para rendirle tributo al legado del gran Bruce Timm, o hace referencia a algo de los cómics que los espectadores más jovencitos no captarán. Pero para ellos va dirigida la cinta, y aquellos que sigan la serie del Cartoon Network en la que se basa, quedarán más que complacidos.
Como mencionado, aquí la meta no es salvar al mundo -al contrario, a veces estos chamaquitos meten la pata tantas veces que atentan contra su porvenir-, sino convencer a la célebre directora “Jade Wilson” (Kristen Bell) de que haga un filme sobre “Robin”. Para ello, los “Titans –“Cyborg”, “Raven”, “Starfire”, “Beast Boy” y “Robin”, se trasladan a Hollywood, no solo en busca de la cineasta, sino de lo que todo gran superhéroe necesita: un archienemigo. Este llega en la forma de “Deathstroke” -perdón, quise decir “¡¡¡SLAAAAADE!!!”-, un villano con poderes de control mental, cuya voz es provista por el incomparable Will Arnett, quien aquí se apunta otra como actor vocal.
El humor, como podrán esperar, es sumamente inmaduro e infantil, pero esto no es sinónimo de tonto. De hecho, la cinta contiene algunos de los chistes más oscuros que he visto en este tipo de entretenimiento familiar, pero solo los adultos entenderán por qué. La mayor parte de las bromas van dirigidas a ese público que goza de lo lindo cuando alguien se tira un peo o dicen la palabra “caca”, sin afán de ser grosero. Teen Titans Go! To the Movies es pura diversión, ligera y chistosita, que exige verse en compañía de niños para contagiar a toda la sala con sus carcajadas y energía.